viernes, 13 de noviembre de 2009

LA PESADILLA DE TENER CARRO

El que hasta hace poco tiempo era el sueño dorado de muchas familias colombianas, tener un carro, terminó convertido en una auténtica pesadilla por cuenta de las múltiples trabas y obstáculos que buscan limitar su utilización pero no su tenencia. Las altas sumas recaudadas por diferentes conceptos y el alto número de familias que directa o indirectamente obtienen su sustento de los carros explican perfectamente esta aparente incoherencia.

A los costos naturales como los caros y malos combustibles, el aceite, el lavado, los seguros, las llantas y el mantenimiento deben sumarse otros que se han inventado para desestimular el uso de los carros y de paso enriquecer a unos cuantos afortunados cuyo único mérito, con pocas excepciones, consiste en ser compadres de este o aquel alcalde.

Por un lado el gobierno subsidia el crédito para impulsar la venta de vehículos, con el objeto de proteger el empleo que genera el sector, tarea necesaria, pero por otro se limita seriamente su utilización con medidas no siempre bien estudiadas y analizadas, de las que resulta un solo damnificado: el automovilista, obligado a pagar cuantiosas sumas por un bien que no se le permite utilizar. Algunas autoridades ante la presencia de problemas complejos, como el de la movilidad, no elaboran alternativas, no hacen ningún esfuerzo por resolverlos, simplemente apelan al cómodo y facilista expediente de prohibir, limitar o restringir, como si la idea fuese diseñar tres problemas para cada solución y no al revés.

Tenemos una amplia colección de medidas muy bien presentadas y adornadas, barnizadas de verde, necesarias claro, como la preservación del medio ambiente, el aumento de la movilidad, la garantía de que los vehículos que circulan están en buenas condiciones mecánicas, la recuperación de la malla vial y otras muchas que harían interminable la lista, que a la postre resultan ser meras banderas que se agitan para justificar buenos negocios. No existe una sola medida relacionada con la tenencia y uso de automóviles que no resulte en una abultada ganancia para alguien.

El famoso RUNT, por ejemplo, concesión otorgada a un grupo de particulares, nació torcido, sigue torcido y es poco probable que en el futuro inmediato se enderece, lo que no fue obstáculo para que por todos los medios se nos informara que el no registro de los vehículos ocasionaba una multa de 963 mil pesos, ni lo ha sido para que las tarifas de los trámites se incrementen en proporciones más que significativas en muchos casos.

Es claro que no se puede cobrar por un servicio que no se presta o que se hace de manera deficiente. Que posterguen la entrada en operación del sistema, ya estamos acostumbrados a los aplazamientos, pero que no nos cobren por lo que no nos dan, máxime cuando los afortunados dueños de la concesión reciben del Ministerio de Transporte el 91% de los derechos económicos de las tarifas por ingreso de datos al RUNT y por expedición de certificados de información. Para ellos no aplican las multas.

La revisión técnico-mecánica y de gases, que pretendía garantizar el buen estado mecánico de los vehículos que transitan en el país, resultó ser un verdadero fiasco. A estas horas y según reporte de las mismas autoridades, faltan más del 50% de los vehículos por cumplir con este deber mientras un alto porcentaje de los certificados son falsos o se han expedido sin realizar la respectiva revisión. La solución consiste en montar retenes y puestos de control para exigir la presentación del documento, a solicitud del ente que agrupa a los Centros de Diagnóstico Automotor, controles pagados con los dineros de los contribuyentes. No debemos pues esperar que la accidentalidad por fallas mecánicas disminuya, lo que debería ser el objetivo principal de la medida.

La razones por las cuales se ha incumplido la norma, sin que ello justifique a los automovilistas tramposos, nacen desde el mismo momento en que se empieza a aplicar la medida, que se aplazó en repetidas ocasiones por física falta de planeación, lo cual llevó a una total pérdida de credibilidad en el proceso. No tienen autoridad moral para exigir cumplimiento, por eso tienen que acudir a la cacería indiscriminada. No se aplicó ninguna multa a los responsables de semejante desorganización.

Los puestos de control de emisiones que montan todos los días son solo la confirmación de que la famosa revisión no funciona, que los 115 mil pesos que cuesta para un automóvil particular son un despilfarro. De todos es bien sabido que el mayor porcentaje de partículas contaminantes es producida por el transporte público que utiliza diesel, no por los automóviles, sin embargo son estos el objetivo de los tales puestos. O sobra la revisión o sobran los puestos de control. Y falta conciencia sobre la necesidad de mantener sincronizados los vehículos.

Los parqueaderos, otro asalto al bolsillo de los infelices poseedores de automóvil, legalizado mediante decreto firmado por el alcalde de Bogotá, al que ni siquiera la orden perentoria que le dio el Tribunal Administrativo ha sido suficiente para que habilite las bahías de parqueo, cerradas hace 10 años de un plumazo pero que para su reapertura requieren de un larguísimo proceso de inventario, pintura, retiro de señales de prohibido parquear, determinación del tipo de cerramiento, demarcación de espacios de parqueo, identificación de cupos para personas con discapacidad, instalación de las señales que autorizan el estacionamiento y otras maravillas de la planeación, lo cual le garantiza a los señores de los parqueaderos una buena temporada de abusos y de jugosas utilidades.
Los patios, karma que debe pagar el automovilista vaya uno a saber porqué, cuyo mal funcionamiento ameritó que la Contraloría de Bogotá enviara un control de advertencia a la Secretaría de Movilidad, son la suma de la cacería desatada, el clímax de la pesadilla. Según la Contraloría, tanto en Álamos como en Fontibón “Hay situaciones que ponen en riesgo las finanzas del Distrito y la adecuada prestación de dichos servicios” Tales situaciones se refieren al mal estado del patio, en el caso de Fontibón, y a la cesión sin autorización de partes del contrato a otras firmas, en el caso de Álamos.

En el 2007 el Distrito recibió solamente 37 millones de pesos de ingresos por inmovilización de vehículos en el patio de Fontibón mientras el concesionario obtuvo por el mismo concepto 1679 millones de pesos. El mismo día en que la SDM suscribió el contrato con Ponce de León (26 de diciembre del 2007), se firmaron adendos modificatorios para subir las tarifas del servicio de patios hasta en un 200 por ciento, incrementos que favorecieron, obviamente, al contratista, según denunció el Concejal Andrés Camacho.

Las grúas son un caso aparte, una verdadera aberración. En su prisa por llevarse los carros los enganchan de cualquier manera, lo cual les ocasiona costosos daños por los que nadie responde. Es frecuente verlos detenerse una o dos cuadras más adelante a asegurar los carros mal enganchados, muchas veces sin la presencia de los agentes de tránsito que ordena la ley.

El cupo de la grúa consiste generalmente en un vehículo que llevan en la plataforma, otro que va colgado y una moto. Sobra decir que a cada uno le cobran como si su vehículo fuera el único transportado. Negocio redondo en el que participan agentes de tránsito, una tripulación que opera en segundos, como si se estuvieran robando el carro y los dueños de las grúas, que son los mismos operadores de los patios. El consorcio Ponce de León posee 40 de las 68 grúas que trabajan para el Distrito, grúas cuya estructura debe ser revisada ya que constituyen una trampa mortal en caso de choque por detrás debido a que en estos casos la plataforma actúa como guillotina.

A pesar de haber sido ordenado por ley el aumento de los límites de velocidad, es común ver a los agentes tanto de la policía de carreteras en todo el país como de tránsito en Bogotá, escondidos, cazando radar en mano a cuanto automovilista les de la oportunidad, sin considerar siquiera la calidad de la carretera por la cual se transita, simplemente aprovechan la lentitud y negligencia de los encargados de la reglamentación de la ley para hacerse unos buenos pesos. Los continuos roces entre los agentes de tránsito y la ciudadanía son un indicador claro de que algo anda mal en la forma como están desarrollando sus funciones unos y reaccionando los otros y que es urgente tomar medidas al respecto.

Lo mismo ocurrió cuando se ordenó transitar por las carreteras con las luces encendidas, norma que desató una verdadera oleada de multas sin que a la fecha se haya informado de estadística alguna sobre la bondad de la norma y menos sobre el destino de las sumas recaudadas. Una verdadera fábrica de comparendos en la que las autoridades aportan la mano de obra y los automovilistas el capital pero sin recibir ninguna verdadera utilidad. Lo de la doble línea amarilla y la imposibilidad para adelantar en los únicos sitios donde es prudente hacerlo bien podría hacer parte de una antología del absurdo.

Un modelo de transporte basado en el automóvil particular es ineficiente y costoso en términos de externalidades, se requiere utilizar los carros de manera racional y limitar su utilización, pero de ninguna manera el automovilista debe ser tratado como delincuente, perseguido ni asaltado a instancias de cierto grupúsculo de fanáticos para quienes prohibir y satanizar se convirtió en moda. Hay que pensar en soluciones, no en crear más problemas.

La reducción de impuestos proporcional al tiempo que no se permita utilizar los vehículos es un mecanismo que obligará a los alcaldes a pensar, a dar opciones y a ser más cuidadosos y menos facilistas a la hora de decidir sobre el tema, por eso es necesario desarrollarlo, para que haya ponderación de las consecuencias de tales medidas y respeto por quienes aportan sumas importantes para los fiscos municipales y departamentales, los automovilistas.

lunes, 26 de octubre de 2009

BOGOTA POSITIVA O LA ESTRATEGIA DEL CULEBRERO

A las múltiples y consecutivas equivocaciones de la alcaldía de Bogotá en el manejo de la movilidad se le suma otra alcaldada de consecuencias muy graves para la ciudadanía debido al cuello de botella que forma. Por cuenta de la disputa con la Federación Colombiana de Municipios, el alcalde decretó el cierre de 12 de los puntos de atención del SIMIT, dejando solo dos para el pago de los comparendos nacionales, por lo que a la doble línea amarilla, la cacería de los radares, los huecos, el invierno, el Ministro y el foco de corrupción en que se convirtió la revisión técnico-mecánica, debe sumarse ahora la casi imposibilidad para pagar los comparendos, como si lo que se pretendiera fuera utilizar a su obligada clientela como medio de presión en un conflicto del que no tiene la menor culpa.

El argumento empleado en esta ocasión es que el artículo 10 de la ley 769 de 2002, Código Nacional de Tránsito y Transporte establece: “Parágrafo: En las dependencias de los organismos de tránsito y transporte de las entidades territoriales existirá una sede del SIMIT.” Este es un ejemplo claro de la aplicación de la ley a rajatabla, carente de toda sindéresis, decisión en la que priman el capricho y la arbitrariedad, no el interés general. No se le ocurrió que una ciudad de 8 millones de habitantes requiere unas condiciones especiales de administración, que debería conocer. La ley también prohíbe el engaño y sin embargo nos embaucó a todos. Sobra decir que no prohíbe la existencia de puntos de atención suficientes.

Son 26 mil los usuarios que mensualmente acuden a estas oficinas, pagadas y mantenidas por el SIMIT, no por la alcaldía, lo que convierte esta medida en un costoso berrinche con cargo al tiempo, el dinero y la paciencia de los automovilistas. Que enmienden semejante despropósito el alcalde o el secretario de inmovilidad, ya, y que tengan respeto y consideración por quienes les pagamos el sueldo. La defensa de los dineros de los bogotanos debe hacerse utilizando la inteligencia e instrumentos jurídicos, no exasperando más a la gente.

Y eso no es todo: el fallo del Tribunal Administrativo de Cundinamarca que ordena el pago de los dineros prohíbe al Ministerio de Transporte la asignación de especies venales, que es como se denominan las codificaciones que asigna el Ministerio de Transporte para las placas, licencias de tránsito, licencias de conducción y certificados de movilización. Es decir, si usted necesita efectuar alguna de estas operaciones no podrá hacerlo hasta que se resuelva la cuestión, lo que podría demorarse un poquito.

Los perjuicios que este absurdo le ocasione no son de incumbencia de la alcaldía sino suya, así que callado y juicioso tendrá que caminar ya no de una ventanilla a la otra sino de un sector a otro de la ciudad, lo cual le permitirá conocer de primera mano la Bogotá Positiva, más incluyente, emprendedora, productiva y con más oportunidades de empleo, más segura y amable, con educación, salud, cultura y recreación para todos y todas, con un ambiente sano, mejor movilidad y servicios de transporte que nos prometió don Samuel, la misma en la que el corredor de seguros que utilizó como propaganda en su campaña nos decía: ¿Quién gana si gana Samuel? gano yo porque podré seguir usando mi carrito para ganarme la vida. Si gana Samuel gana usted, si gana el pasado perdemos todos: Y resultó ser exactamente lo contrario, si ganó Samuel pero perdimos todos los demás, perdió Bogotá.

Estrategia de culebrero, con una diferencia, los ungüentos contra la calvicie y la impotencia y las pócimas de amor que estos vendían no producían efecto alguno, por lo que eran técnicamente productos sanos, mientras los de este son un verdadero peligro por lo inútiles, improvisados y arbitrarios.

Ahora, ojo automovilistas, anda con la idea de prohibir un solo pasajero en los vehículos particulares. Como harán los padres que llevan hijos al colegio, ¿se devuelven con uno de ellos? Y los que solo llevan uno, ¿se quedan durmiendo en el carro hasta la hora de salida? ¿le pondrá pico y placa a los colegios o a los niños? y los que necesiten dejar un enfermo en la clínica, ¿se internan con él hasta que salga?

Al paso que vamos tendremos que aprender a montar a caballo y a conducir zorras, esos peligrosos vehículos que transitan por donde les da la gana, no tienen pico y placa, no pagan impuestos, no reciben comparendos, ni siquiera pedagógicos, y funcionan con un motor de un solo caballo que se acelera con látigo y madrazos, combustibles, eso si, mucho más limpios y baratos que la gasolina y el diesel. Claro que los caballos expulsan CO2, pero no le cuenten, no sea que con sus contratistas amigos nos cree un organismo encargado de medirle los gases a los animalitos.

http://www.sca.com.co

martes, 15 de septiembre de 2009

YA NO ES MORENO SINO OSCURO

A estas horas resulta bastante creíble la especie de que el alcalde Samuel Moreno simplemente está cumpliendo compromisos adquiridos con otros sectores y personas, sin importarle que su desconocimiento, improvisación y engaños nos estén costando tanto a los bogotanos, no solo al millón de automovilistas que estafó, sino, peor aún, a la gran masa que deriva directa o indirectamente su sustento de los carros.

Las cifras y estadísticas proporcionadas por entidades gremiales como Asopartes, Fedispetrol y Fenalco, entre otras, dan cuenta de una dramática reducción en sus ventas, lo cual solo tiene un desenlace posible, la pérdida de empleos, que afecta principalmente a la gente de menores recursos, a los que no tienen carro, a los que dicen proteger.

Pero todo, incluso lo más malo, como la gestión en movilidad, tiene su lado bueno. El alcalde y los otros, los que a falta de recursos y creatividad han convertido las prohibiciones y restricciones en mecanismos para gobernar, nos han hecho saber con toda claridad que no son personas competentes, que tienen poca o ninguna credibilidad y que en el futuro será mejor desconfiar de él, de sus socios y de su gestión, por mucha emisora que monte y comerciales de televisión que pague. A propósito, ¿con plata de quien?

No podía esperarse mucho de quienes sin ningún análisis ni reflexión fueron capaces de salir a decir que el recaudo de la sobretasa se había incrementado gracias al mal llamado “pico y placa,” así que lo raro hubiese sido que el tal decreto 268 hubiese quedado bien redactado, sin el “vacío jurídico” que le permite a los dueños de los parqueaderos meternos la mano al bolsillo otro poquito. Otro “error” en contra de los automovilistas, cuando no omisiones y desconocimiento de la ley, como ocurre con las bahías de parqueo. ¿sera mera coincidencia? ¿antes no pagaban IVA?

Que hagan su agosto los parqueaderos, las grúas, los patios y sus demás beneficiarios y persecutores de los automovilistas mientras puedan, porque, si de algo puede estar seguro el alcalde, es que su capital político se redujo en por lo menos un millón de votos, que es mucho más de lo que tenía. Si revocar el peor mandato de la ciudad en muchos años es tan difícil, entonces, por favor, no le pidan a este señor que actúe, déjenlo que termine su periodo y que se vaya, a menos que tengan ganas de verlo rectificar, sonriente, cada 8 días.

Y los automovilistas, o somos capaces de unirnos y de hacer respetar, dentro de la ley, nuestros derechos o pasaremos a engrosar la lista de especies extintas, ya no por el calentamiento global sino por la ineptitud y mala leche del personaje de marras y su combo y por nuestra propia apatía. Poseer o utilizar un automóvil no nos convierte en delincuentes a quienes se deba perseguir, asfixiar y explotar en beneficio de intereses particulares no siempre muy claros.


Fernando Márquez
Sociedad Colombiana de Automovilistas

DECLARACIONES CONCEDIDAS A RCN EL 5 DE MAYO DE 2008
“Por motivos de productividad la propuesta del pico y placa 24 horas no le suena mucho al alcalde de Bogotá. “Me parece que sería un golpe duro para la economía de las ciudades que adoptaran de manera permanente o en varias oportunidades el día sin carro”, dijo Samuel Moreno.”

lunes, 15 de junio de 2009

ETANOL EN ANTIOQUIA Y EL CHOCO

Algunas consideraciones ahora que se anuncia con bombos y platillos la llegada del etanol a Antioquia y el Chocó.

El estudio titulado “ESTUDIO DE MEZCLA DE GASOLINAS CON 10% DE ETANOL,” realizado por el propio Ecopetrol a través del Instituto Colombiano del Petróleo, ICP, señala, entre un verdadero cúmulo de peros que valdrían un extenso análisis, que “se han mostrado beneficios ambientales desde el punto de vista de reducción de emisiones de CO y THC, (monóxido de carbono e hidrocarburos no quemados) con aumento o reducción de los niveles de NOx que depende de la tecnología del vehículo y del combustible utilizado, pero, por otro lado, han mostrado un aumento en el RVP, (presión de vapor del combustible, medida de volatilidad) lo que aumentará las emisiones evaporativas, VOCs, una limitada tolerancia al contenido de agua de los combustibles y un comportamiento diferente con los métodos de revelado y cuantificación del aditivo marcador.”

Esto significa, en términos simples, que debido a la oxigenación de las gasolinas con etanol mejora la combustión, gracias a lo cual se logra una significativa reducción de monóxido de carbono y de hidrocarburos no quemados, que es lo que le permite a sus promotores afirmar que hay ganancia ambiental, pero el aumento de emisiones evaporativas señalado en este y prácticamente todos los estudios realizados en el mundo, tiene serias implicaciones de salud pública que requieren estudios y análisis amplios, profundos y, sobre todo, independientes.

Estos Compuestos Orgánicos Volátiles, VOCs, combustible crudo que es expulsado a la atmósfera, reaccionan con la radiación solar y producen un notorio incremento en la concentración de ozono troposférico, tóxico relacionado directamente con la morbi-mortalidad por Enfermedad Respiratoria Aguda, ERA.

En Bogotá, en el año 2005 (antes de la llegada del etanol) se hallaron 22699 promedios horarios, de los cuales 31 se encontraron por encima del valor que establece la norma. Todos estos se presentaron en la estación NO. 2, MAVDT, (Centro de Bogotá.)

Durante el año 2007 (cuando ya se estaba utilizando etanol) se calcularon 30290 promedios de una hora de O3, ozono, los cuales tienen una representatividad del 86%. TODAS las estaciones presentaron promedios máximos por encima de la norma, según información proporcionada por la Secretaría Distrital de Ambiente. ¿Que pasará en las ciudades donde la radiación solar es mayor que en Bogotá? ¿Hay estudios que muestren como se deben mitigar estos efectos nocivos? ¿Dónde están?

Los óxidos de nitrógeno, NOx, tiene un efecto invernadero 300 veces mayor que el del CO2, tan mencionado en este tipo de análisis, así que tampoco es cosa de poca monta que exista “aumento o reducción de los niveles de NOx que depende de la tecnología del vehículo y del combustible utilizado” no basta con señalar tal probable incremento, es necesario reducirlo y establecer planes de mitigación. ¿Qué hay al respecto?

Otro compuesto altamente tóxico que se produce de manera exclusiva por la combustión del etanol es el acetaldehído, que tiene el potencial para producir cáncer y malformaciones genéticas. La respuesta que han dado los Ministerios a este señalamiento (instauramos una demanda por estos hechos) es que si se produce pero en cantidades insuficientes para llegar a producir daño a los seres humanos. Vale la pena sin embargo preguntarse si el incremento de vehículos (y a futuro de la mezcla) expeliendo esta sustancia por donde transitan o estacionan no podría, eventualmente, conducir a acumulaciones peligrosas, como en los parqueaderos subterráneos, por ejemplo, sin que se haya tomado medida alguna para mitigar el efecto perjudicial del acetaldehído y demás tóxicos producidos y menos aún, se haya informado a la comunidad sobre sus riesgos. Y no lo harán por el efecto perjudicial que tendría para la comercialización de su producto.

Es más fácil engañar a la gente llamando “biogasolina” a la mezcla de 90 partes de hidrocarburos con 10 de un combustible de origen biológico que llamar a las cosas por su nombre y obrar de acuerdo al sentido común y el verdadero interés general, todo en aras de expandir un negocio que poco o nada aporta ambiental, mecánica o socialmente y cuyo único y probado mérito consiste en reportar inmensas utilidades a sus productores, ayudados por los errorcitos del gobierno al diseñar las fórmulas mediante las cuales se calcula el precio por galón de etanol, como lo demostró recientemente el Profesor Kalmanovitz, lo que se tradujo en una reducción de más de 1500 pesos por galón y el anuncio subsiguiente de que en el futuro próximo tendremos que utilizar mezclas E85, es decir, 85 partes de etanol y 15 de gasolina para mantener así contentos a los productores, sin importar que estos combustibles estén lejos de ser una verdadera solución.

Estas son algunas de las razones por las que la Unión Europea esta revaluando sus metas de utilización de biocombustibles y ha exigido a varios países, Colombia entre ellos, la implementación de un sello de calidad ambiental, que garantice, entre otras cosas, que no habrá tala de bosques, cambio de destinación de las tierras de cultivo, desplazamiento ni asesinatos de los poseedores de tierras aptas para estos cultivos, como ocurre en Curvaradó y Jiguamiandó, en el Chocó. Difícil que tal sello se pueda implementar en el país o que garantice efectivamente que ninguna de estas situaciones se seguirá produciendo.

C. Fernando Márquez M.
Sociedad Colombiana de Automovilistas
Director Ejecutivo

miércoles, 1 de abril de 2009

APROBADO PROYECTO DE LEY QUE BUSCA TUMBAR EL PICO Y PLACA DE MÁS DE 7 HORAS

Como que despues de todo Samu-el pasara a ser Samu-el-oso

En la Comisión Primera de Cámara fue aprobado el proyecto de ley de autoría del representante Nicolás Uribe, por medio del cual se prohíbe limitar los derechos fundamentales de los ciudadanos a través de restricciones vehiculares por más de siete horas, tal como lo dicta la medida del alcalde Samuel Moreno que implementó un Pico y Placa durante todo el día, pasando de 6 a 14 horas diarias.

“Con este Proyecto estamos protegiendo, solamente en Bogotá, a cientos de miles de ciudadanos que han perdido el 40% de sus ingresos por cuenta de una restricción que además de ser ineficaz con la movilidad viola al menos tres derechos fundamentales: al trabajo, a la libre empresa y a la libre circulación”, afirmó el Representante.

En la práctica, de aprobarse este proyecto en los tres debates restantes, el Alcalde de Bogotá deberá replantear de manera obligatoria la implementación de un pico y placa de todo el día y las demás ciudades de Colombia no podrán implementar una medida de restricción vehicular como la que actualmente existe en Bogotá.

sábado, 28 de marzo de 2009

SAMUEL, NO MAS MENTIRAS

Soy uno de los ilusos e incautos que creímos en las palabras de Samuel Moreno (“ni un minuto más de pico y placa”) y que además puso a una buena cantidad de personas a votar por él. Que pena con ellos, tarde descubrí que este es solo uno más de los tantos mentirosos y oportunistas que pueblan este país, que se hacen elegir a punta de engaños y cuentos chimbos.

Pero la razón de esta nota no es la de lamentarme por lo que ya no tiene arreglo, solo quiero decirles que con el cuento de que el recaudo por sobretasa aumentó quedaron todos pintados de cuerpo entero, improvisadores y poco serios. ¿Como no se les ocurre pensar en lo absurdo de la afirmación? Piensen, aunque sea un poquito que eso no da meningitis. ¿No les da pena salir a decir que fue culpa del banco?

Y una cosa final: Ustedes no son los dueños de Bogotá y más temprano que tarde tendrán que irse por donde vinieron; lo bueno de todo esto es que de muchas maneras nos estamos uniendo para decirles: BASTA DE MENTIRAS Y DE IDIOTECES. No tienen idea del daño que con sus mentiras y sus arbitrariedades le hicieron a la ciudad, a la ciudadanía y al Polo. Que Dios los lleve y los deje por allá.

C. Fernando Márquez M.

viernes, 6 de marzo de 2009

CONTRALORIA GENERAL PIDE REVISAR MEDIDA DE PICO Y PLACA


CARACOL | Marzo 5 de 2009

Fernando Márquez, Director Ejecutivo de la S. C. A. surante su intervención en el Congreso de la República en defensa de los automovilistas. La sectorización del PyP fué una de sus sugerencias.
El contralor general de la Nación Julio César Turbay Quintero, expresó su preocupación frente a la baja productividad que han reportado los gremios económicos y comerciales de Bogotá, por lo que hizo un llamado al alcalde Samuel Moreno para que reconsidere la medida.

“Después de haber escuchado diferentes sectores, gremios y comunidad, la recomendación es que se revise seriamente el pico y placa y se proceda a una nueva reglamentación que esté más en sintonía con las necesidades del país y de la capital de la República”, manifestó Turbay Quintero.

Durante una audiencia pública sobre el impacto del pico y placa extendido en Bogotá, el gremio de los combustibles, denunció grandes pérdidas para su sector. “Estamos perdiendo 60 millones en sólo utilidades diariamente, se están dejando de vender mil millones de pesos de gasolina diarios, en 60 estaciones de servicio encuestadas, hay 60 despidos hasta el día de ayer, lo que quiere decir que el panorama en las estaciones no es muy productivo”, reveló Álvaro Yunez, gerente de Fedispetróleo.

Entre tanto, cifras reveladas por Fenalco, reportaron que la medida de pico y placa todo el día, han reportado pérdidas en un 16% en la participación de las ventas de la ciudad.

Sectores del Congreso también se han unido a las voces de protesta contra la medida de pico y placa y piden su pronto desmonte, ya que advierten una profunda crisis social si la iniciativa se mantiene.

“Yo veo con mucha preocupación como cada día que pasa es un día más que se constituye en un hito más para la pérdida de empleo y que desafortunadamente no están siendo monitoreados por la administración distrital. Esta medida es una bomba atómica para la productividad de la ciudad”, aseveró el representante Nicolás Uribe.

Gremios comerciales y políticos de Bogotá coinciden en señalar que la medida de pico y placa extendido debe ser desmontada de forma inmediata.

Pico y Placa está colapsando el transporte urbano y el Transmilenio

El nuevo horario del "pico y placa" en Bogotá esta colapsando el sistema de Transmilenio y de Transporte Público, según un estudio del congresista Simón Gaviria.

El representante a la cámara por Bogotá, explicó que las mediciones arrojaron que el hecho de no utilizar el vehículo particular incrementó una demanda de pasajeros en estos tipos de transporte público.

"Como hay mucha más gente buscando Transmilenio, como no pueden utilizar el carro; los buses van llenos, al igual que los alimentadores, por esto los ciudadanos tardan mas en sus recorridos al esperar en el paradero un bus que no este abarrotado de gente" señaló el congresista.

Además, el estudio arrojó que la velocidad en los recorridos ha disminuido. En Transmilenio de 28.4 kilómetros por hora a 16.6 y en transporte se servicio público de 18.2 a 15.7

Gaviria propuso el tres por uno en los semáforos, que consiste en que la luz en verde, por las vías principales, dure tres minutos y tan solo un minuto por las intersecciones.

También sugirió imponer la nueva medida del Pico y Placa "geográfico", solo en el centro de Bogotá y aumentar los dígitos por día con restricción.

sábado, 21 de febrero de 2009

TOCO AGUANTARNOS EL PICO Y PLACA TODO EL DIA

De Andrés Ruíz.
http://andresruizsays.blogspot.com/2009/01/toco-aguantarnos-el-pico-y-placa-todo.html

Tingo, tingo, tingo, tingo…. TANGO ! Le tocó a Samuel Moreno hacer lo que los alcaldes anteriores no fueron capaces ni se les dio la gana de hacer. Era necesario.

Afortunadamente para mi salud mental, tengo una pésima memoria, un par de veces he olvidado mi propio cumpleaños, en fin., para el caso, no recuerdo cada cosa que han hecho los alcaldes anteriores, es complicado recordarlo; pero mis ojos le ayudan a mi memoria y por eso veo que hay ciertas cosas que definitivamente NO HAN HECHO.

Nací en el 80, y he vivido en Bogotá toda mi vida, así que por más mala memoria que tenga, es imposible olvidar las vías por las que mi propia vida se ha movido, es imposible olvidar la caracas antigua por ejemplo, imposible olvidar la carrera 7a en mi infancia, la 19… etc. Así que me pongo a pensar y resulta que confirmo lo que han dicho los medios, los alcaldes anteriores no le han puesto seriedad al tema de las vías, tenemos hoy casi las mismas vías que al final de los años 70 ! Todos se pasaron la pelota como en el juego de mi infancia y tingo, tingo, tingo, tingo….TANGO! A Samuel Moreno le tocó.

Cómo se sabe que le tocó? pues fácil, la crisis de movilidad llegó a límites nunca antes vistos y las vías parecen campo de guerra (siempre lo han parecido) pero esta vez parecen del bando que va perdiendo la guerra.

Entonces al señor Moreno le tocó poner la ciudad en obra y es lógico que nuestras vías de la época Disco no van a dar a basto con el mismo tráfico, así que puso el famoso día de pico y placa completo, así que ya la palabra “pico” no aplica mucho que digamos. El caso es que nos jodimos, a la gente que depende del carro para trabajar pues se le complicó la vida en serio (y no son 3 pelagatos como le gusta afirmar a Peñalosa).

Dios los bendiga y los ilumine porque dependiendo del carro para trabajar y no poderlo usar 2 días a la semana pone en aprietos a cualquiera, y no se ilusionen, los impuestos de los carros no van a bajar, el secretario de movilidad dijo que el impuesto era a la propiedad y no al uso, entonces así usted no pueda usar el carro debe pagar los impuestos completicos porque aun es de su propiedad… PENDEJO !! Será que una persona compra un carro para meterlo debajo del pesebre. Pues Obvio que la gente no lo compra por tenerlo sino por USARLO… Que Idiota, disculpa de puro político ladrón, claro que no me sorprende en lo absoluto. (eso es lo más grave).

Afortunadamente yo trabajo en un colegio fuera de Bogotá, así que uso el transporte escolar para ir y venir del trabajo, mi padre tiene 2 carros así que por el momento no lo perjudica mucho la norma, en fin, a unos pocos afortunados no nos afecta, pero al resto le va a dar duro la norma, duro duro. Como dice el señor Moreno, espero que sean 2 años de sacrificio para poder disfrutar de unas mejores vías en el futuro. Dios lo oiga Samuel porque si esto no le funciona creo que lo van a linchar; como en los viejos tiempos (literalmente).

Iba yo en la ruta del colegio escuchando la W Radio cuando comienzan a hablar del tema y por supuesto hablan con Samuel, le dicen que no hay nada que dure más en Colombia que una ley temporal. Es verdad, los políticos más corruptos se han aprovechado de su poder para hacer esas cosas, han puesto vainas temporales (pico y placa entre otras) que supuestamente (por definición) eran por un tiempo y luego se retiraban, pero hoy en día no solo siguen vigentes sino que son cada vez más restrictivas y abusivas. Por la salud física del señor Moreno, espero que esta sea una de las primeras leyes temporales que sea REALMENTE TEMPORAL.

Ya iba yo a llegar al trabajo cuando pasan a la belleza esta, al EX-Alcalde Peñalosa a dar su opinión. Hay Dios, cómo le van a dar papaya a este tipo, pues la pregunta era sencilla, si estaba o no de acuerdo con el pico y placa todo el día… el tipo medi dijo que no pero de ahí para delante agarró a meternos de nuevo su cuento de vendedor de aspiradoras puerta a puerta… otra vez que la solución es transmilenio por todas partes, que el metro nos va a acabar, que todos están equivocados, que el único que sabe es él, que transmilenio y transmilenio y transmilenio.

Luego que al fin le pudieron cerrar la boca un rato le preguntaron por otra vaina que ya no me acuerdo y sale este tipo con la peor brutalidad del mundo. Dice que habilitar las bahías DE PARQUEO, está mal, que va en contravía con las restricciones para los carros, que las bahías DE PARQUEO no deberían ser usadas para parquear porque eso estimula el uso del carro.

Pedazo de _________ hasta las grandes ciudades europeas, modelo de movilidad y cultura tienen bahías de parqueo, hay lugares en la calle donde la gente puede parquear porque SIMPLEMENTE NO HAY PARQUEADEROS EN TODAS PARTES…. PENDEJO !!! Y usar carro no es un crimen ! Por Dios !.

Como que el papá no le prestaba el carro a Enriquito cuando estaba pequeño, entonces el nene vive ardido y envidioso de todos los que tienen carro y basó su vida en atacar como sea al uso del carro particular. Ahora que ya está viejo pues la neurona no le responde para aprender a conducir y no se aguanta las ganas cada que puede de joder a los que tienen carro, quiere que paguen los impuestos más caros del mundo, la gasolina más cara del mundo (estamos cerca de eso) y que no puedan usar el carro casi nunca…. ah, y que cuando se pueda sacar el carro, que no se pueda parquear en ninguna parte, así tienen disculpa para recogerle el carro a uno y llevarlo a los patios, donde por cierto no cobran parqueadero, sino hospedaje tipo hotel de 5 estrellas.

Saben que hay algo que me gusta de Peñalosa? si, en serio hay algo, de hecho son 2 cosas:

1. Ya no me molesto tanto con lo que dice, ahora me dan risa todas las burradas que dice y la repetidera de la repetición de su fantasía sexual. El Transmilenio.
2. Lo que más me gusta es que es… EX alcalde. Espero no vuelva a ser alcalde nunca más. Eso depende del éxito o fracaso de Samuel Moreno, si mete la pata, Peñalosa se nos vuelve a meter y nos pone TM hasta en la sopa, nos recicla los carros pero nos obliga a seguir pagando impuestos y gasolina. No se cómo, pero lo hace.

Listo, eso fue todo, ya me desahogué.

jueves, 19 de febrero de 2009

FORO SOBRE "PICO Y PLACA"

“EL PICO Y PLACA AMPLIADO, LA PRODUCTIVIDAD Y EL EMPLEO EN ÉPOCA DE CRISIS”

-PROPUESTAS ALTERNATIVAS PARA LA MOVILIDAD-

Congreso Nacional, Salón Elíptico, Capitolio Nacional
Martes 24 de febrero de 2009
9:00 a.m. a 1:00 p.m.

9:00 a.m. Acto de Instalación “Presentación de las iniciativas impulsadas por el H.R. Nicolás Uribe para la protección de los derechos fundamentales de los ciudadanos y la estructuración de una ciudad y una región viable”
H.R. Nicolás Uribe Rueda

9:20 a.m. Crisis y afectación de la economía y del comercio derivada de la restricción vehicular del Alcalde Samuel Moreno

Director Ejecutivo de FENALCO Bogotá
Doctor Francisco de Paula Ochoa Palacio

9:40 a.m. Afectación del empleo en el sector automotor con la ampliación del pico y placa
Presidente ASOPARTES
Doctor Tulio Zuloaga

10:00 a.m. Impacto de la restricción vehicular todo el día en el sector de los combustibles y el empleo del sector
Presidente FEDISPETROLEO
Doctor Álvaro Younes

10:20 a.m. Afectación en el sector agrícola en Boyacá con la restricción vehicular
Secretario de Fomento Agropecuario de la Gobernación de Boyacá Doctor Gerardo Arias Rojas

10:40 a.m. Reducción del empleo y problemas financieros del sector empresarial con la medida del Alcalde Samuel Moreno Rojas
Doctor Arturo Calle Calle
Empresario



11:00 a.m. Impacto de la restricción vehicular en las Mypimes
Doctora Silvia Tovar
Gerente General La Batería LTDA
Empresaria

11:10 a.m. Afectación del empleo en las Mypimes del sector de combustibles y estaciones de gasolina
Doctor Julio Orlando Borda
Gerente General Texaco 10
Empresario

11:20 am La afectación de los centros comerciales y del comercio con la ampliación del pico y placa
Centros Comerciales
Doctor Hernán Montoya Junta Directiva Centro Comercial
Unicentro

11:30 am El impacto negativo del pico y placa ampliado para quienes Utilizan
el vehículo como instrumento de trabajo Fernando Márquez
Presidente de la Sociedad Colombiana de Automovilistas


11:40 am Impacto ciudadano de la restricción vehicular durante todo el día
Kenny Pacheco
Vocero del Grupo Ciudadano en contra de la ampliación del pico y placa

11:50 am Sugerencias y propuestas
Moderador: H.R. Nicolás Uribe Rueda

12:40 p.m. Acto de Clausura
H.R. Nicolás Uribe Rueda

martes, 17 de febrero de 2009

AUMENTAR LA DURACIÓN DEL PICO Y PLACA IMPLICARÁ MÁS PÉRDIDAS QUE BENEFICIOS PARA LOS BOGOTANOS

La decisión de restringir el uso del automóvil en 40% durante todo el día en Bogotá seguramente constituye un nuevo record mundial en términos de limitación de la libertad de movilidad para los ciudadanos.

Ya conocemos las historias de las restricciones de Santiago y México D.F., que en su momento limitaron el uso del automóvil durante todo el día en 20%. También están bien documentadas las desastrosas consecuencias que generaron estas medidas: Se buscó solucionar con esto el grave problema ambiental y lo que se obtuvo fue un aumento considerable en el uso de los vehículos más contaminantes.

Un primer elemento que sorprende es que, aparte de una encuesta de opinión, la medida se toma sin ningún tipo de estudio serio. El Alcalde plantea que se afectarán cerca de 500.000 vehículos al día y confía en que, gracias a esa reducción, el impacto de las obras en curso sea menor. De hecho, esos 500.000 vehículos ya están afectados en los períodos pico. No queda entonces claro el impacto que se tendría en horas no pico y en itinerarios que no generan congestión.

Los bogotanos hemos adoptado un estoicismo idiota ante el problema de la movilidad. Durante cerca de una década, las medidas realmente importantes - como el desarrollo del Sistema Integrado que mejore la totalidad del transporte público, la recuperación de la malla vial, una mínima gestión del tráfico y la expansión de la red vial - fueron reemplazadas por el pico y placa. La medida “temporal” se constituyó en la droga adormecedora que justificó la inmovilidad de las autoridades de transporte en múltiples campos.

Al analizar la teoría económica es fácil entender porqué tan solo algunas pocas ciudades en el mundo han adoptado este tipo de medidas y porqué han terminado por desecharlas. Cuando una persona decide utilizar el automóvil lo hace porque obtiene una utilidad es decir, porque el viaje que realiza contribuye a su bienestar, y además, en la mayoría de los casos, contribuye a aumentar el producto y el bienestar de la sociedad. Por eso mismo el restringir la movilidad implica pérdidas considerables para el bienestar de las personas y para la economía de la ciudad.
Si en la actualidad los bogotanos usuarios del automóvil soportan la congestión, cuadran sus horarios para amortiguar el “pico y placa” y se resignan ante el estado de las vías, es porque para ellos el uso de su vehículo sigue siendo la mejor opción y quizás es la única aceptable.

Un estudio reciente que analiza la situación en varias ciudades del mundo[1] concluye que las pérdidas económicas ligadas al “pico y placa” ascienden hoy por hoy a los 150 millones de dólares anuales. Este análisis toma en cuenta la desutilidad o pérdida de utilidad de los usuarios del automóvil cuando no utilizan el vehículo, así como los ahorros de tiempo que se derivan de la menor congestión de las vías. El balance indica que la utilidad obtenida cuando viaja un mayor número de usuarios del automóvil es mayor que el valor del tiempo ahorrado gracias a la descongestión de las vías.

Al aumentar la duración del pico y placa, la desutilidad de los bogotanos va a aumentar mientras que los ahorros en tiempo de viaje serán limitados, puesto que la restricción adicional operará fuera de las horas de mayor congestión o sea que su impacto sobre las velocidades será proporcionalmente menor.
Es claro que una de las metas que se persiguen con el “pico y placa” es un menor uso del automóvil, lo cual es deseable desde el punto de vista ambiental. Pero el efecto puede ser el contrario si los usuarios terminan por comprar un segundo automóvil, como ha ocurrido en otras grandes ciudades.

Por otra parte, mientras los usuarios no tengan modos de transporte alternativos, aún medidas más racionales para limitar el uso del automóvil - como las políticas de estacionamiento o los peajes urbanos - pueden tener impactos negativos importantes sobre la economía de la ciudad.

Este último es el caso de Bogotá. En la situación actual, con un sistema de transporte público caótico, Transmilenio saturado, altos niveles de contaminación atmosférica que hacen insalubre el uso de la bicicleta, ¿somos capaces de reubicar los viajes diarios que se realizan en automóvil y que en su mayoría son viajes productivos, o nos están condenando a movernos menos, a ser menos productivos, a tener menos oportunidades?

¿Qué esperar en caso de que se mantenga la medida? Un sacrificio excesivo de los bogotanos, un posible deterioro de los niveles de servicio de Transmilenio, el mismo trancón en los períodos de punta, la adopción permanente del pico y placa, la compra de un nuevo vehículo por parte de los más ricos y un aumento sustancial del número de motos, con nefastas consecuencias en términos de accidentalidad, de espacio público y de ruido en las calles.

* Ph.d. en Transporte de la Universidad de París y Director del Grupo de Transporte de la Universidad de Los Andes.
Nota de pie de página

[1] Bocarejo JP, 2008, “Impact économique des politiques liées à la mobilité : les cas de Londres, Paris, Bogotá et Santiago », Tesis de doctorado Universidad París Este

sábado, 14 de febrero de 2009

SAMUEL MORENO ES COMO UNA TORTUGA EN UN POSTE

Un joven estaba paseando por la Plaza Bolívar en Bogotá y decide tomar un descanso. Se sienta en un banco y al lado hay un señor de más edad y naturalmente comienzan a conversar sobre el país, el gobierno, la comunidad y finalmente sobre SAMUEL MORENO ROJAS, actual alcalde de Bogotá por el Polo Democrático. El señor le dice al jóven:

"¿Sabe? SAMUEL MORENO ROJAS ES COMO UNA TORTUGA EN UN POSTE".

Después de un breve lapso de tiempo el joven dice:"No entiendo eso de la tortuga sobre el poste. ¿Qué significa eso señor?" El señor le responde:"Si Ud. va caminando por el campo y ve arriba de un poste de alambrado una tortuga haciendo equilibrio encima. ¿Qué se te ocurre?"

Viendo la cara de incomprensión del muchacho joven este le explica: "Primero: TÚ no entiendes cómo llegó ahí...Segundo: TÚ no puedes creer que esté ahí...Tercero: TÚ sabes que no pudo subir allí solita…Cuarto: TÚ estás seguro que no debería estar allí...Quinto: TÚ eres consciente que no va a hacer nada ÚTIL mientras esté allí... Entonces lo único sensato sería ayudarlo a bajar de allí.

ALCALDE, NO NOS CREA TAN PENDEJOS

La decisión de aumentar el mal llamado “pico y placa” a todo el día en Bogotá es una de esas medidas que nos obligan a cuestionarnos sobre la verdadera capacidad de nuestros gobernantes, si es que carecen de ella o si la tienen en exceso pero la utilizan para fines distintos a los de proteger los intereses de la ciudadanía, como parece suceder en el caso de Samuel Moreno.

Que otra cosa puede pensar el ciudadano trabajador cuando ve sus derechos cada vez más recortados, sin concertación ni consideraciones de ninguna clase, mientras con los transportadores, beneficiarios directos de esta arbitrariedad, “se está concertando la medida” ¿como así? Alcalde, no nos crea tan pendejos!

También queda uno muy despistado cuando recuerda el “ni un minuto más de pico y placa,” frase que le valió el respaldo de un amplio número de automovilistas, que hartos del acoso diario a que nos tienen sometidos, lo pusimos allí. Nos mintió, nos estafó y de paso se llevó no solo su propia credibilidad sino la del partido que dice representar.

Y que pensar cuando una institución tan seria como la Universidad de Los Andes asegura que solo saldrán de circulación entre 180 y 212 mil carros particulares, no los 530 mil que dice Moreno, lo que representa un desfase cercano al 60%. ¿Que interés puede haber en manipular esta información? ¿o es que de verdad le resultan tan difíciles los números? Tampoco nos resulta creíble el cuento chino de que la medida es temporal. Creámosle a Los Andes que nunca nos ha mentido.

La medida en si misma es un monumento a la falta de sentido común, a la improvisación, a la ineficacia, a la desconsideración y a la falta de visión. En ninguna cabeza que funcione bien cabe que el trancón se remedia sacando de circulación unos carros particulares para meter 3 mil y pico de buses que competirán con los particulares sobrevivientes por unas pocas vías en regular estado y unas trochas dignas de camper cross.

Dentro de unos pocos meses las ventas de carros usados habrán igualado el número de los que no pueden circular y no tendremos ninguna solución pero si un problema mayor, porque con seguridad tendrá que emitir un nuevo decreto en el que se prohíba la circulación no solo por números de placa sino por modelos para enmendar hasta donde pueda la barbaridad que cometió. Créanme que no es nada absurda ni lejana la posibilidad.

La imaginación no le alcanzó a Moreno para pensar, por ejemplo, en la sincronización de los semáforos, en la señalización de las obras para evitar que la gente se meta en los trancones cuando ya no tiene opción de devolverse; tampoco se le ocurriría revaluar el papel represor de la policía de tránsito para convertirlos en organizadores del tráfico, no en cazadores, en construir pasos elevados o subterráneos para Transmilenio lo que aliviaría filas interminables en sectores críticos como la calle 80 y muchísimo menos en modificar horarios, utilizar la tecnología para evitar desplazamientos innecesarios o en educar a la ciudadanía para que aprenda a utilizar racionalmente sus vehículos. No, como en el viejo cuento, hizo lo más fácil, vendió el sofá.

Jamás consideró el negativo efecto que para las empresas representa el no poder entregar sus mercancías a tiempo, lo cual es especialmente grave para las que comercian con productos perecederos, es decir, con la comida de la gente. Cosas como esta han llevado a que algún sector de la industria esté considerando solicitar al Ministerio de Protección Social autorización para imponer a sus empleados una especie de “pico y placa” laboral en virtud del cual un porcentaje de sus empleados no trabajaría durante uno o dos días a la semana, sin remuneración, obviamente, para disminuir sus costos de operación y sobrevivir al frenazo económico que esta medida representa. El efecto que esto tendría es verdaderamente apocalíptico.

No pensó en lo que tendrán que hacer para sobrevivir con menores ingresos los que directa o indirectamente obtienen su sustento de los carros, que son más de un millón de personas solamente en Bogotá. Ignora las nefastas consecuencias que esto tiene para la seguridad ciudadana y le importa poco aumentar la pobreza en una ciudad donde hay gente que ya aguanta hambre. Todos, con o sin carro, terminaremos pagando las consecuencias de la improvisación y el facilismo.

El tema es muy complejo y las soluciones no se ven cercanas ni fáciles, pero lo mínimo que podría esperar uno de quien gobierna la primera ciudad del país es un poco más de análisis y de imaginación y no la elección de, simplemente, la más fácil y a mediano plazo más riesgosa jugada para mejorar la inmovilidad a la que las incompetencias gobernantes nos tiene sometidos. Que haga una encuesta pública, a la luz del día, en la que además se propongan soluciones, que con seguridad las hay muy buenas. Quizá aquello de que el pueblo es superior a sus gobernantes sea cierto y le ayude en algo, así por lo menos empata

¿ES NECESARIO EL AUMENTO DEL PICO Y PLACA? (Publicado en El Tiempo, febrero 4 de 2009)

Probablemente. Pero llegamos a necesitarlo debido a una larga cadena de errores cometidos por nuestros gobernantes, entre los cuales se pueden mencionar sin temor a equivocarse: falta de planeación, de visión, de imaginación, de pensamiento a largo plazo, de compromiso con la ciudad y, en no pocas ocasiones, a falta de capacidad para gobernar.

Y sigue ocurriendo: el aumento del “pico y placa” es una seudo-solución, facilista y efectista más no efectiva, que no resuelve ni siquiera tangencialmente los problemas de fondo, es decir, la escasez y mal estado de las vías y el exceso de vehículos, agravado por los de servicio público que no ha sido posible chatarrizar, los taxis piratas que tampoco han podido controlar, las zorras y el previsible aumento del parque automotor usado que entrará a rodar, costo en el que quienes puedan incurrirán para evadir la restricción, es por eso que este tipo de medidas suele, a mediano plazo, tener un efecto contrario al que se busca.

Si el Gobierno Distrital quisiera resolver problemas estructurales debería empezar por restringir “temporalmente” la importación, ensamble y venta de motos y vehículos en Bogotá. Pero dudo que lo haga, estos son grupos con un inmenso poder de lobby que no le permitirían semejante exabrupto. Por el contrario, estarán pensando en como aumentar sus ventas sin que importe mucho la congestión que se produzca.

Este aumento en la restricción tiene también un efecto indeseado y peligroso sobre la economía de la ciudad si consideramos el alto número de personas que directa o indirectamente derivan su sustento de los carros, mecánicos, latoneros, pintores, lavaderos, estaciones de servicio, almacenes de repuestos, talleres y un larguísimo etcétera de damnificados por esta absurda medida, elementos que sin duda actuarán como disparadores de la inseguridad, la violencia y otras plagas sociales que nuestro Alcalde no parece haber considerado y que nos afectarán a todos, con o sin carro.

¿Dispone la ciudad de un sistema de transporte masivo suficiente para absorber el abrupto aumento en la demanda? La respuesta es un categórico NO. El ingreso de buses y busetas adicionales no es un factor que contribuya a la descongestión y empeorará a niveles peligrosos la contaminación ambiental que ya padecemos y que cuesta vidas y millones de horas laborales perdidas, aspecto que tampoco mencionó el Alcalde. ¿Alguien se enteró de la encuesta que “afianzó su decisión”?

Debemos poner punto final a la manía de imponernos barbaridades cada que se les antoja. No podremos utilizar los carros durante un 30% del tiempo, por lo tanto es razonable que los impuestos y costos asociados a su utilización, como las pólizas de seguro, el SOAT, las multas, las grúas, los patios de tránsito, la semaforización, el rodamiento y demás arandelas disminuyan EN LA MISMA PROPORCIÓN, así quienes toman este tipo decisiones estarán obligados a planear y a ejecutar cuidadosamente para evitar detrimento patrimonial a la ciudad y a si mismos, si es que la ley se aplica con todo el rigor con que debería aplicarse.

El cambio de horarios para algunos grupos de tal manera que la ocupación de vías no se concentre en las horas pico, el teleestudio y el teletrabajo son opciones que un buen número de personas podría desarrollar sin necesidad de desplazarse y que bien podría considerar el Alcalde, la tecnología necesaria ya existe, se necesitaría la decisión de pensar a fondo los problemas y de buscarles soluciones inteligentes y duraderas. ¿mucho pedir?

Si bien la falta de mantenimiento de la malla vial no puede atribuirse exclusivamente a Samuel Moreno, este podría exigir que el 25% que pagamos de sobretasa a la gasolina se invierta para lo que fue creado este tributo y no para seguirle construyendo vías y reparando losas a Transmilenio, que no ha dejado ni dejará de ser una empresa particular a la que el Estado y el Distrito le han otorgado una prebendas inimaginables en detrimento de quienes utilizamos nuestros vehículos como instrumento de trabajo.

Todo esto sin olvidar que todo lo que pase en Bogotá afecta el país entero y que los modelos aquí creados son rápidamente imitados por autoridades de otras ciudades y municipios. Al paso que vamos nos seguirán prohibiendo y recortando derechos en aras de un muy discutible “interés general” que parece cada vez más cercano a los intereses de los grandes grupos económicos y más lejano de las necesidades de la gente.

NO PERMITAMOS QUE SE SIGA IMPROVISANDO Y NEGOCIANDO CON NUESTRO DERECHO AL TRABAJO Y A LA LIBRE MOVILIZACION Y RECORDEMOS QUE EN COLOMBIA LO TEMPORAL TERMINA SIENDO PERMANENTE.